¿Qué es la hepatitis A, cuáles son las causas, cómo se puede prevenir y tratar?
Aunque no es una enfermedad mortal y se presenta generalmente en niños, la hepatitis A la puede contraer cualquier persona, produciendo algunas afecciones al organismo.
La hepatitis es una enfermedad que se caracteriza por la inflamación del hígado, y es generada por diversas causas entre ellas trastornos de tipo autoinmune, traumatismos, lesiones en el hígado y presencia en el organismo de algunas drogas, toxinas y medicamentos; aunque generalmente es un virus el responsable de dicha afección.
Hasta el momento se conocen varios tipos de virus que desencadenan la hepatitis entre los cuales se encuentran: virus A, virus B, virus C, virus D, virus E, virus G, entre otros, aunque los que con mayor frecuencia se presentan son los tres primeros mencionados; existen diferencias significativas entre cada uno de ellos.
En este artículo se dará más información sobre la hepatitis A y cómo tratar de prevenirla.
¿Qué es la hepatitis A?
Es una enfermedad causada por el virus de la hepatitis A, el cual genera una inflamación del hígado, que no permite que éste funcione de una manera adecuada.
¿Quienes contraen la hepatitis A?
La hepatitis A la puede contraer cualquier persona que esté en contacto con el virus.
Los que con mayor frecuencia se ven afectados son los infantes.
Adicionalmente existen grupos con alto riesgo de contraer esta enfermedad:
- Individuos que tienen contacto sexual con una persona infectada con la hepatitis A.
- Personas que se inyectan drogas.
- Trabajadores que se desenvuelven en el campo de la salud.
¿Cómo se contrae la hepatitis A?
Existen varias formas de contraer la hepatitis A, entre las más comunes están:
1. Contacto directo de persona a persona: es la forma de transmisión más frecuente, se presenta por el contacto con el virus de la hepatitis A, generalmente por:
- Comer alimentos o beber agua que han sido contaminados por heces (materia fecal) que contienen el virus de la hepatitis A.
- Contacto directo con las heces o la sangre de una persona que esté contagiada de este virus.
- Contacto en la boca con objetos o ingesta de comida que estuvieron en contacto con una persona con hepatitis A, que no se lavó las manos apropiadamente después de ir al baño para pasar a manipular las cosas y/o alimentos.
2. Por contacto sexual (oral y/o anal) con una persona que esté contagiada con este virus.
3. Infección del virus por uso de drogas intravenosas: se relaciona con higiene deficiente y el uso compartido de agujas y/o jeringas.
4. Por transfusión de sangre (forma de transmisión poco frecuente: puede ocurrir cuando el donador está en el período de incubación de la enfermedad y esta no es detectada fácilmente.
La enfermedad no se contrae cuando una persona con hepatitis A:
- Tose o estornuda.
- Se sienta al lado de otra persona.
- Abraza a una persona.
- Consume leche materna.
Algunas diferencias entre hepatitis A y hepatitis B
- La infección por hepatitis A es menos grave que la infección por la hepatitis B.
- La hepatitis A no se contagia fácilmente por vía se xual, a diferencia de la hepatitis B.
- La hepatitis A suele contagiarse por vía oral y fecal, mientras que la hepatitis B se contrae por la sangre y distintos fluidos corporales.
¿Cuáles son los síntomas de la hepatitis A?
Las manifestaciones y duración en cada persona se presentan de manera diferente, sin embargo algunas de las más comunes son:
- Náuseas.
- Vómito.
Fiebre.
- Dolor abdominal (especialmente en el lado derecho del abdomen).
- Malestar general.
- Coluria (orina oscura).
- Heces de color arcilla o pálidas.
- Ictericia (color amarillo de la piel y de los ojos).
- Menos del 1% puede desarrollar una falla hepática fulminante, llegando a requerir trasplante de hígado.
Generalmente quienes contraen esta afección se sienten enfermos dos a seis semanas después de contagiarse con el virus de la hepatitis A; se puede sospechar por sus manifestaciones, aunque algunas personas no las presentan, por lo que la confirmación del diagnóstico requiere pruebas de laboratorio.
En la mayoría de los casos la enfermedad pasa sin dejar ninguna secuela y el hígado mejora en forma completa.
¿Cuál es el tratamiento contra la hepatitis A?
No existe un tipo específico de tratamiento para la hepatitis A, pero se recomiendo reposo y evitar sustancias tóxicas para el hígado como el licor y medicamentos de metabolismo hepático.
A diferencia de la hepatitis B y C, la hepatitis A no causa enfermedad hepática crónica, tampoco hepatocarcinoma (tipo de cáncer hepático) y muy rara vez es de carácter mortal.
Vacuna contra la hepatitis A
La vacuna contra este tipo de hepatitis previene la enfermedad. Se fabrica con virus muertos (inactivos) y protege preparando al cuerpo para luchar contra el virus.
Prevención de la hepatitis A
Existen formas de prevenir la hepatitis A, por lo cual a continuación se mencionan algunas:
- Lavarse las manos después de ir al baño y/o cambiar pañales, y también antes de manipular alimentos. También abstenerse de llevarse cualquier objeto a la boca.
- Desinfectar en forma adecuada los lavamanos y sanitarios, es decir lavarlos con detergentes y desinfectantes.
- Lavar y además hervir los elementos que utiliza la persona que está contagiada con el virus, como lo son platos, pocillos, cubiertos, entre otros.
- Lavar muy bien las frutas y verduras que se propongan a ingerir crudas.
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