EL banano es una fruta deliciosa, y además tiene grandes propiedades que nos ayudan a mantener una excelente salud y a mejorar nuestro ritmo de vida, gracias a que es rico en carbohidratos y fibra.
Gracias a su alto contenido de potasio y su pobre aporte de sodio, es una fruta ideal para quienes sufren de hipertensión arterial o enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos.
Es bueno para controlar la presión arterial y ayuda a bajar el nivel de colesterol. Sin embargo, por esta misma razón deben cuidar su consumo quienes tengan insuficiencia renal y quienes además no hagan algún tipo de actividad física.
El banano No te engorda de forma fácil como erróneamente se cree
Tiene la mala fama de engordar, porque para muchos lo que es dulce engorda, sin embargo, estas personas no se dan cuenta que lo que puede estar afectando su peso es todo lo demás que consumen en su dieta.
Las frutas, incluyendo el banano, deben consumirse con el estómago "vacío" (diferencia de 2 horas entre comidas), preferiblemente en ayunas.
No se deben combinar las frutas, aunque el banano por ser una fruta dulce, puede combinarse con otras de su mismo grupo como por ejemplo la papaya, entre otras.
No se debe combinar frutas de distintos tipo (dulces, ácidas, semiácidas, neutras) para evitar malas digestiones, gases, entre otros males.
Entre sus principales características se encuentra que el Banano es una gran fuente de Vitaminas A, C y del Grupo B, especialmente B1, B2, y B3.
Aporta una gran cantidad, a nuestro cuerpo, de Magnesio y más que todo de Potasio (sirve mucho para evitar cansancio) que favorece el mantenimiento de la tensión arterial correctamente. Es el más indicado para que las personas con anemia o fatiga lo consuman.
Es además indispensable para quienes realizan actividad física como correr, practicar deportes o ir al gimnasio, por su gran aporte en carbohidratos de fácil digestión y el ya mencionado potasio, que sirve para evitar el cansancio y recuperación muscular.
TRATAMIENTOS EN LOS QUE INTERVIENE EL BANANO:
Depresión:
Todas las mañanas, en ayunas, tomar un vaso de agua acompañado de un Banano (o un banano solo), ya que ayuda a mejorar el estado de ánimo, la depresión, la hiper actividad, y además, relaja el Cerebro.
Lavado de Heridas:
Rallar y Secar las cascara del Banano, moler y colocar las cenizas en la parte afectada.
Hipertensión:
Tomar el cocimiento de la cáscara de Banano Verde, fresca, a cualquier hora del día con el estómago vacío (antes o después de 2 horas de haber comido).
Diarreas Crónicas:
Cortar un trozo de Banano (con la cáscara aun) de unos 5cm, hacer en el centro una pequeña concavidad u hoyo rellenándolo con miel de abeja, tapar y dejar de un día para otro. Se obtiene, de esto, un Jarabe cuyo suministro debe ser de una cucharada 3 veces al día.
Come más banano si quieres aumentar tu masa muscular
Pero ojo, recuerda que si quieres que tus músculos aumenten su tamaño y su fuerza debes entrenar duro para este fin. Así que no importa cuanto banano comas, no vas a logra que tus músculos hipertrofien si no entrenas y si no descansas bien en las noches de sueño.
El banano te ayuda a aumentar el tamaño de tus músculos puesto que aporta buenas cantidades de vitamina B6, misma vitamina que es crucial para poder sintetizar proteínas de forma óptima.
Es por esta razón que muchos entrenadores (incluyéndome) recomendamos agregar uno o dos bananos a un batido post entrenamiento, ya sea que se trate de un batido casero o de un suplemento de whey protein o de beef protein.
El banano además aporta una buena cantidad de fructosa, misma que el organismo almacena en forma de glucógeno en el hígado y en nuestros músculos para así promover de forma óptima la recuperación muscular y general de nuestro cuerpo.
Fortalece tus intestinos con el consumo constante de banano
El banano aporta una buena cantidad de prebióticos los cuales se encargan de alimentar a los probióticos (bacterias buenas) de nuestra flora intestinal.
Pero ojo, no te estoy diciendo que te comas un racimo de banano entero si tienes diarrea o si te cae mal casi todo lo que comes.
Esas lanitas o "tiritas" que se ven principalmente en la cara interna de la cáscara del banano es lo que más contiene prebióticos. Así que come más banano (a menos que tengas diabetes o que estés en una dieta de reducción de peso en grasa corporal).
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