Desintoxicar el hígado es la fórmula contra la obesidad. Consejos para bajar de peso en 30 días. ¿Sabías que la desintoxicación del hígado es indispensable por lo menos unas tres veces al año? Una dieta rica en frutas, verduras y granos ayuda a limpiar este órgano del cual dependen 22 tareas vitales para el buen funcionamiento del organismo.
Una de sus funciones es producir bilis para ayudar a desdoblar y quemar las grasas, además se encarga de purificar la sangre y convertir los alimentos en energía, aseguran también médicos ayurvédicos.
Consecuencias de un hígado enfermo
Las consecuencias de no cuidar el hígado van desde obesidad, una mayor incidencia de enfermedades cardiovasculares, fatiga crónica, dolores de cabeza, problemas digestivos hasta alergias y muchos otros males. Y aunque el sistema inmunológico protege el organismo de muchos peligros, es el hígado el que "blinda" al sistema inmunológico de la sobrecarga.
De acuerdo con los médicos nutricionistas, los problemas del hígado se pueden presentar por malos hábitos desde la infancia. Hay niños que se "toman" el hierro de la madre y les afecta el hígado, o que no comen hamburguesa con salsa sino salsa con hamburguesa.
Entonces, una sana alimentación puede evitar que el hígado colapse. Eliminar los alimentos industrializados, las harinas y azúcares, es el paso más importante para desintoxicar tu hígado y tu cuerpo y fortalecer el sistema linfático.
Además hay que erradicar de la dieta diaria las grasas, los aderezos, la crema de leche, las leches enteras, tratar de no cocinar con condimentos, sino con especias, tomar mucha agua y hacer ejercicio (para evitar también otras enfermedades).
Abstenerse además de las bebidas carbonatadas (gaseosas y jugos enlatados). Consumir solo 1 yema de huevo al día (las claras si se pueden comer en más cantidad). Tratar de cambiar la leche de vaca por leche de almendras.
¿Qué se debe comer al desayuno para cuidar la salud del hígado
Al desayuno lo ideal es comer frutos secos remojados en leche de almendras o hacer un licuado de guayaba con frutos secos que es excelente para la memoria y el cansancio general. Además se puede consumir la Chía la cual es una semilla excelente para limpiar el hígado.
Como recomendación especial, hay que decir que las frutas y los jugos se deben consumir por lo menos 30 minutos antes (No durante) y 1 hora después de las comidas, para no dañar el Ph de los jugos gástricos que se preparan para digerir otro tipo de alimentos.
Tampoco es muy recomendable combinar las sopas con el arroz, ya que además que vas a quedar repleto lo cual no es aconsejable ya que sobrecarga tu hígado y vuelve tu metabolismo lento. Los aderezos que se pueden adicionar a las ensaladas son: aceite de oliva, vinagres de fruta y limón. Es importante también bajarle al dulce y a las harinas.
Las personas que quieren cuidar más su hígado deben dejar a un lado las carnes rojas y las frías o embutidos y comer en su lugar pollo asado, sin grasa, a la plancha, y pescado, preferiblemente tilapia o de represa pero que tenga espinas y adicionarle un poco de limón.
Si se trata de pacientes con problemas hepáticos, hepatitis y hepatomegalia, o crecimiento del hígado, le deben ser retirados totalmente de la dieta las carnes y suministrarle una dieta vegetariana.
Además deben consumir muchas leguminosas como lentejas, garbanzos, blanquillos, fríjoles y mazorcas. Para quienes sufren de colon, que no toleran las leguminosas, la alternativa son los fríjoles verdes que son más suaves, y tomarse solo el caldo de las lentejas al almuerzo (en las comidas no consumir leguminosas puesto que pueden traer problemas intestinales a la hora de dormir).
Los productos naturales siempre serán lo mejor para evitar un hígado irritado o graso
Los productos naturales como las frutas y las verduras son esenciales, pues aportan fibra que ayudan al hígado a sacar del cuerpo las toxinas. Los vegetales de hoja verde como el repollo, lechugas, brócoli, espinacas, apio y frutas como la toronja, el mango, limones, la papaya, la naranja, la manzana y la piña, entre otras, además de suministrar nutrientes y antioxidantes, contienen vitaminas y minerales necesarios para el funcionamiento normal del cuerpo.
Actualmente hay muchos productos naturales que complementan la limpieza del hígado, como un desparasitante para el colon e hígado, que lleva boldo, zen y ruibarbo; se debe tomar una cápsula todas las noches dos horas antes de acostarse con una aromática.
Otras opciones son los jarabes como el Hepatopran y el Hepatomillar, concentrados de plantas naturales para terminar de limpiar el hígado, los cuales se pueden tomar en ayunas o en la noche.
También hay regeneradores de hígado como el "cardo mariano", una planta herbácea originaria de Europa, la cual debido a su contenido de silimarina y silibinina, desintoxica el hígado de sustancias como el alcohol o las drogas nocivas.
Otro producto natural es el Picolinato de Cromo el cual se debe tomar bajo supervisión médica de 8 a 15 días o 1 mes, y sirve para ayudar a metabolizar los azúcares y las grasas, ayuda al hígado y al páncreas a funcionar mejor y es excelente para bajar de peso.
Si puedes realizar estas recomendaciones mencionadas, en 30 días podrás reducir de talla, perder peso y mejorar la salud en general. El hígado es la base de gran cantidad de procesos metabólicos, por eso merece un trato especial.
¿HÍGADO IRRITABLE?
Síntomas:
1. Nauseas, especialmente después de comidas grasas, hinchazón abdominal y estreñimiento.
2. Levantarse por las mañanas con mal aliento o lengua manchada.
3. Desagradables cambios de humor, depresiones, mente nublada y dificultad para la concentración y memoria.
4. Condiciones alérgicas como fiebre. urticaria. erupciones cutáneas y asma.
5. Dolores de cabeza, tensión alta, retención de líquidos, fatiga y síndrome de fatiga crónica.
6. Excesiva temperatura corporal.
7. Baja tolerancia al alcohol y a algunos medicamentos como los antibióticos.
¿POR QUÉ LAS DIETAS EXTREMAS NO FUNCIONAN?
¿Por qué 8 de cada 10 dietas para perder peso no funcionan? Porque la mayoría no contempla la desintoxicación del hígado, órgano clave para filtrar las grasas y las toxinas del organismo. La obesidad y el sobrepeso están relacionados con un mal funcionamiento del hígado, pues al no tener una alimentación sana, lo sobrecargan de tóxicos que impiden su función adecuada.
El hígado hace la labor de "quemar" la grasa, además de desintoxicar la sangre, por eso, si éste está saturado de toxinas se le dificulta o le es imposible desdoblar las grasas. Y al no quemar la totalidad de las grasas, éstas se irán acumulando en el organismo y la persona no podrá bajar de peso fácilmente.
EL hígado también se encarga de producir y secretar la bilis que estimula el proceso digestivo. Ejerce funciones metabólicas y sintetiza una serie de compuestos vitales, entre ellas la producción de ciertas proteínas que circulan la sangre y nos ayudan en los procesos de coagulación de la misma.
Los malos hábitos se convierten en una serie de estímulos que llevan al hígado a trabajar el doble y ponen en riesgo su adecuado funcionamiento.
Este órgano se intoxica por la mala alimentación, el exceso de grasas rancias, las margarinas, el alcohol y el escaso consumo de fibra vegetal. Todo esto conlleva a un mal funcionamiento también del colon y por ende a un mayor esfuerzo del hígado por limpiar las toxinas en la sangre.
El consumo de medicamentos químicos e incluso, algunas emociones como la ira o irritabilidad y la frustracción (cómo las emociones afectan la salud), también contribuyen a afectar sus funciones.
Es aconsejable buscar técnicas mediante las cuales se pueda mantener la mente tranquila, como el ejercicio físico, la oración y la meditación. Y permanecer en ambientes familiares y de trabajo en armonía, que eviten las emociones negativas.
Por todo ello, limpiar el hígado dos o tres veces al año es lo ideal para mejorar la salud general de nuestro cuerpo, la calidad de los órganos como la piel y lograr la pérdida de peso.
Fuentes:
María Amelia Bueno, médica ayurvédica del Centro Médico Imbanaco, Cali.
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