Una de las razones por las cuales debemos cuidar de nuestros dientes, y en general estar atentos al aseo de toda nuestra boca, es para evitar la enfermedad periodontal o periodontitis crónica.
Ésta se da por la gran acumulación de bio-película de placa bacteriana alrededor de toda la boca (incluyendo las encías y dientes).
La placa bacteriana está compuesta de alrededor de 400 tipos de bacterias, que generalmente se alojan entre la encía y el hueso, que se manifiestan a causa de una pobre higiene oral, acompaña muchas veces de una alimentación deplorable, ya que alimentos "malos" o chatarra promueven la acumulación de más bacterias si se pasan muchas horas sin cepillar los dientes.
El azúcar es el alimentos preferido por estas bacterias
Las bacterias que se forman sobre la superficie de los dientes, combinadas con los azúcares (principalmente los simple refinados y algunos complejos o almidones) provenientes de los alimentos, reaccionan produciendo un ácido que ataca a los dientes.
Esto ocurre aproximadamente a los 20 minutos después de haber consumido algún alimento, teniendo en cuenta que entre más oscuro (café, chocolate) y/o más dulce sea en sabor, más prejudicial será.
Durante este tiempo el ácido ataca el esmalte de los dientes y los debilita, formando las temidas caries.
Pero no termina ahí, debido a que hay personas que pueden sufrir ataques al corazón por medio de bacterias que se pueden alojar en los dientes, provocando infecciones en las arterias y por ende complicaciones a nivel cardiovascular, aumentando el riesgo de muerte si no es tratado a tiempo.
Por tal razón, no solo por estética se debe llevar una buena salud dental o, mejor, una higiene oral adecuada.
Mantén tus dientes sanos no solo por lo estético sino también por lo funcional
También se debe mantener un buen cuidado en los dientes, no sólo por los factores estéticos y los problemas relacionados con bacterias que se alojan entre los dientes y que pueden atacar al corazón.
sino también por la funcionabilidad que ellos tienen en nuestra vida diaria, debido a su importancia en la alimentación en cuanto a la masticación y deglución de alimentos, además de las enzimas que se producen al masticar.
Otra importancia se ve reflejada en la acción que ejercen cuando hablamos, ya que sin ellos no podríamos pronunciar muchas consonantes.
De lo anterior, la gran importancia de cuidar los dientes y mantener una buena higiene oral, y no dejarla solamente para cuando toque la visita la odontólogo.
Tips para mantener una boca y dientes saludables:
1. Escoger una crema dental con fluoruro.
2. Cepillarse los dientes todos los días por lo menos tres veces, o si es posible hacerlo unos cuantos minutos después de ingerir cualquier tipo de alimento, siendo las más importantes, pero no únicas, después del desayuno, después del almuerzo y antes de irse a dormir.
3. También se debe cepillar suavemente la lengua ya que en ella también se acumula suciedad y por ende bacterias. Las encías nunca se deben cepillar.
4. Escoger cepillos suaves-medios y cambiarlos frecuentemente, por ejemplo cada quince días o cada semana.
5. Cuando se visite al odontólogo se le deberá preguntar si es necesario usar algún tipo de enjuague bucal, previo a la misma valoración que él o ella hayan hecho.
6. Evitar los alimentos "superazucarados" como las golosinas, pasteles, postres, etc., no solo por lo relacionado a los dientes, sino para evitar acumulaciones excesivas de grasa corporal.
7. Cuando se practiquen deportes de contacto, se deberán usar equipos de protección externos e internos (dentro de la boca) para proteger la cara y por ende la dentadura.
8. Si se está tomando algún tipo de medicamento, se deberá preguntar al médico general u odontólogo si éstos tendrán algún efecto negativo sobre los dientes y, si es así, que se puede hacer para contrarrestarlo.
9. Lo más conocido que es No fumar, ya que los compuestos del cigarrillo manchan los dientes, generan mal alimento por la cantidad de químicos que traen, además de aumentar el riesgo de padecer distintos tipos de cáncer.
10. Si se tiene algún tipo de llaga o irritación en la boca que no se quita o no se cura con nada, y lleva mucho tiempo con ellas, se debe acudir al odontólogo para que él evalúe y recomiende el tratamiento adecuado.
11. Las visitas al odontólogo se deberían hacer al menos una vez al año, en caso de no sufrir de algún tipo de complicación grave, aunque lo mejor sería ir a limpieza oral cada 6 meses.
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