¿Comer alimentos congelados es bueno o malo para nuestra salud?
La capacidad de manipular las bajas temperaturas ha cambiado a través de los años la forma de nutrirnos.
No solo porque ya no es necesario consumirlo todo de manera rápida, sino porque se posibilita el acceso a alimentos frescos que provienen de regiones lejanas como si vinieran del supermercado de nuestra ciudad o de la tienda que queda a la vuelta de la esquina.
He aquí algunos mitos y verdades sobre los alimentos congelados, como por ejemplo que pierden todas sus propiedades nutricionales cuando esto no es cierto.
¿Los vegetales, frutas y verduras pierden sus propiedades nutricionales al ser congelados?
Esto es totalmente falso. La mayor parte de las frutas, verduras y vegetales conservan sus nutrientes, sabor, color y textura si se manipulan y congelan de manera correcta.
Los vegetales que se cosechan y se congelan de inmediato pueden preservar mejor sus cualidades que aquellos que sufren procesos de transporte, manipulación y cambio de temperatura, entre otros.
De hecho, la FDA (Food and Drug Administration de Estados Unidos) reconoció que congelados son tan buenos como aquellos frescos y determinó que podían ser denominados "saludables".
¿Son mejores los congelados que ya vienen preparados que los que se hacen en casa?
Falso. Los productos que ya vienen congelados pueden tener sal, aditivos y conservantes, mientras que la fruta o verdura que se consigue en el mercado y que se congela en casa no necesita ningún elemento que necesite ser añadido.
Lo importante es escoger productos de muy buena calidad, lavarlos bien con agua y limón o vinagre, cortarlos y guardarlos en recipientes o bolsas de congelar retirando todo el aire de forma que se logre el empaque al vacío.
¿Es lo mismo utilizar una bolsa plástica que una bolsa especial para congelar los alimentos?
La respuesta es "no". Las bolsas para congelar son de material especial que no se modifica con la temperatura y tienen sellamiento hermético que ayuda a que se cierre el producto en un entorno más seguro.
¿Es mejor descongelar los alimentos a temperatura ambiente que por otros medios?
La respuesta es "depende". "Temperatura ambiente" es un término vago, no es igual en una ciudad que en otra.
Lo recomendado sería pasar del congelador al refrigerador y dejar descongelar los alimentos en éste. La siguiente opción sería sumergir el recipiente o bolsa sellada en agua fresca (nunca caliente), de forma que se descongele por transferencia o robo de calor de forma gradual.
Los alimentos se pueden descongelar en el microondas, pero siempre se corre el riesgo de que el proceso se pase unos segundos y la textura del alimento se deteriore.
¿Los alimentos pueden dañarse si están congelados?
No. Si están congelados a una temperatura adecuada, sellados y se han manipulado poco y en forma cuidadosa, pueden durar indefinidamente. Si el producto ya está contaminado al congelarse, la baja temperatura no mata los patógenos sino que detiene la velocidad en que se multiplican.
¿Un alimento que se descongela no debe volver a congelarse?
La respuesta es "preferiblemente no". Por un lado, mientras más se manipule, mayor será el riesgo de que sea contaminado.
Por otro lado, el proceso de descongelado favorece la multiplicación bacteriana y podría haber riesgo de una intoxicación alimentaria. El consejo es consumir lo más pronto posible cualquier tipo de alimento después de ser descongelado.
¿La congelación deteriora la textura de los alimentos?
Todo depende. La mayoría de las carnes, frutas y verduras no se deterioran con la congelación, sino que por el contrario, se conservan mejor.
Sin embargo, algunos alimentos, sobre todo aquellos que contienen almidones como papas, yucas, plátanos, etc., si se modifican con las bajas temperaturas y adquieren una textura "acartonada".
Tampoco deben congelarse la mayonesa ni las salsas grasas ya que el frío las "corta" separando el agua de la grasa o puede acelerar los procesos de "enranciamiento".
Otro proceso que puede darse es el de "quemadura por frío". Esto ocurre porque el alimento se deshidrata (si no está en un recipiente hermético) y pueden producirse manchas de color oscuro o cambios en la consistencia.
¿Siempre es mejor fresco que congelado?
La respuesta es "depende". Siempre será mejor un alimento fresco de buena calidad y que no haya sufrido manipulación o transporte.
Sin embargo, los congelados suelen preservar muy bien los nutrientes, sabor, color, y textura de los alimentos y son una forma fácil de garantizar que se cuente con vegetales y frutas, así estén fuera de temporada, listos para servir a lo largo de todo el año.
PARA TERMINAR: realmente lo malo de los alimentos que vienen empaquetados y que se mantienen congelados suele ser su precio.
Usualmente el costo de estos alimentos suele ser un poco más elevado en comparación a aquellos que se mantienen al aire libre y a temperatura ambiente en los mostradores de las tiendas y/o supermercados.
La ventaja de los alimentos congelados y empaquetados es precisamente su poco contacto con el medio ambiente y por ende el menor riesgo que hay de que éstos se contaminen de gérmenes y bacterias.
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