Evita todo aquello que pueda hacerte engordar para que puedas mantener un buen estado de salud evitando todas las enfermedades relacionadas con la obesidad.
En este artículo mencionaré algunos malos hábitos nutricionales que ocasionan que una persona engorde, es decir que gane peso en grasa corporal, misma que se acumula en forma de triglicéridos en el tejido adiposo, principalmente el ubicado en la zona abdominal y también en el tejido visceral ubicado alrededor de los órganos.
Cuando una persona busca bajar de peso en grasa corporal, si o sí debe realizar ciertas modificaciones en la dieta, que No implican aguantar hambre como tal.
Se debe aprender a comer para evitar engordar o subir de peso, se debe aprender a moderar las porciones, a saber cómo mezclar los alimentos, a saber qué alimentos evitar y qué alimentos NUNCA excluir de un plan alimentario, como es el caso de los cabohidratos complejos que nunca deben faltar en una dieta, aun cuando ésta sea con el fin de adelgazar (reducir medidas y peso en grasa corporal).
Y por supuesto, se debe incluir la práctica de ejercicio físico aeróbico y/o aeróbico-anaeróbico para ayudar a la "quema" de grasa de manera directa, y también de manera indirecta por medio del aumento metabólico basal que se produce con la estimulación de las fibras musculares esqueléticas de contracción rápida.
Conoce los malos hábitos que hacen que engordes y evítalos
1. No desayunar o aguantar hambre, y ejercitarse en ayunas.
Usualmente se cree que aguantar hambre es el mejor camino para evitar engordar.
Esto es un grave error, ya que aunque es cierto que por algún tiempo el cuerpo experimenta pérdidas de grasa corporal, luego entrará en lo que se conoce como "modo ahorro", en donde al ver que son pocos los nutrientes macro que entran, empieza a ahorrar, es decir a acumular lo poco que le entra en el tejido adiposo como grasa corporal.
Más aun cuando se eliminan de la dieta los tan importantes y necesarios carbohidratos complejos.
Ahora, esto sumado al hecho de que la persona tendrá unos niveles glucémicos inestables, que ocasionan pérdida de energía, debilidad, mareos, dolores de cabeza, y posible riesgo de sufrir hipoglucemia.
2. No mantenerse hidratado, además de tener el mal hábito beber agua junto con las comidas o justo después de consumirlas.
El agua es muy importante en el proceso de digestión de alimentos, dado que éste se lleva a cabo a través de la hidrólisis (unión de una moléculas de agua con otra de otro tipo).
Pero entonces, se trata de agua que ya está asimilada en el organismo y por tanto se encuentra circulando a través del torrente sanguíneo, y que ya está en las distintas células de nuestro organismo.
De ahí que es recomendado beber agua 15-30 minutos antes de las comidas.
Es poco recomendado usar el agua como pasante de alimentos sólidos, ya que ésto ocasiona una posible alteración del pH sanguíneo, alteración en la composición de enzimas digestiva, y probable ralentización del proceso digestivo, ocasionando una ineficiente absorción de nutrientes.
Beber agua puede ayudar a adelgazar dado que la lipólisis ("quema" de grasa) también se lleva a cabo por medio de la hidrólisis, pero No se trata del agua que se consume junto con alimentos, como si esta se llevara inmediatamente la grasa que consumimos a través de los mismos, lo cual es una mala creencia.
3. Suspender todas las grasas.
Obsesionarse con no consumir grasas es un error, puesto que no todas son nocivas para la salud.
Las grasas saturadas y trans son las únicas que se deberían evitar por completo de la dieta, y no las insaturadas.
Nuestro organismo necesita entre un 20 a un 30% de aporte por medio de los ácidos grasoso provenientes de este tipo de grasa "buenas" (solo en exceso pueden resultar "malas" haciendo que engordemos), para poder cumplir funciones neurológicas, endocrinas, biliares, etc.
Alimentos con este tipo de grasas saludables son el aguacate, frutos secos, aceite de oliva, entre otros.
4. Eliminar todos los tipos de carbohidratos.
En este punto cabe mencionar lo escrito en el punto número 1 en relación al "modo ahorro", cuando se elimina por completo de la dieta los carbohidratos complejos, cuando los únicos que se deberían eliminar por completo, o por lo menos reducir su consumo lo más que se pueda, son los carbohidratos simples de bajo valor nutricional y alto contenido calórico como helados, pasteles, postres, gaseosas, etc.
Además de comidas fritas y embutidas, que solamente nos aportan grandes cantidades de calorías provenientes de grandes cantidades de glucosa y ácidos grasos de fácil y rápida absorción.
Ojo, no es que la glucosa y los ácidos grasos sean malos. Hay que tener en cuenta que lo malo es cuando los consumimos en exceso, más aun proveniente de este tipo de carbohidratos "malos".
5. Consumir sopas.
Si escuchas a alguien decir que "la sopa de verduras es muy nutritiva", es cierto, pero no por la sopa en sí que es solamente agua, sal y otros colorante, sino por las verduras como tal.
Así que hay que optar por el consumo de ensaladas de verduras en lugar de sopas.
Además, el hecho de someter mucho tiempo a altas temperaturas las sopas, de lo que sean, hacen que pierdan algo del valor nutricional de los alimentos que se les pueden agregar.
Las sopas en sí, es decir el agua con sus saborizantes y colorantes, no aportan nutrientes.
Son los complementos lo que lo hacen, pero en este caso es mejor consumirlos de manera directa, es decir que en lugar de sopas de verduras, sopas de pollo, sopas de huevo, etc., es mejor consumir las verduras, el pollo, el huevo como tal.
6. Comer una gran cantidad de alimentos por unidad de tiempo.
Consumir postre, zumos de frutas u otro tipo de bebidas, incluyendo el agua para rematar las comidas "grandes".
Lo que hace que engordemos es el exceso de alimentos consumidos por unidad de tiempo.
De ahí que un exceso de solamente frutas o de solamente proteínas (alimentos que erróneamente se cree que No engordan), puede hacer que acumulemos grasa en exceso en nuestro tejido adiposo, si así nuestro cuerpo lo requiere, principalmente cuando los almacenes glucogénicos hepáticos y musculares se encuentran llenos, precisamente por ese exceso de alimentos ingeridos por unidad de tiempo (los aminoácidos, el glicerol, pueden convertirse en glucosa si así se requiere).
Más cuando se remata una comida con un postres, un zumo de frutas, vino, etc., y la misma agua, que aunque no aporte calorías puede ralentizar el proceso digestivo cuando se consumo muy "pegada" a las comidas "grandes" (leer muy bien el punto número 2).
7. Abusar del exceso de licor (lo recomendado sería No consumirlo).
La mayoría de personas toma en cuenta lo que come pero no lo que toma, desconociendo que cada gramo de licor, tiene aproximadamente 7 a 8 calorías provenientes de la glucosa (que le da "sabor).
A esto se suma que, por lo general, cuando se ingiere alguna bebida alcohólica, se tiende luego a consumir alimentos ricos en grasas saturadas, como se acostumbra en algunos países después de salir de rumba, siendo lo más popular las comidas rápidas o comida "chatarra", que usualmente no son chatarra en sí, si tenemos en cuenta que por ejemplo una hamburguesa tiene su carbohidrato complejo (pan), la porción de proteína (carne, pollo), y las verduras (tomate, lechuga, cebolla).
Lo malo es que la carne de res en sí tiene grasas saturadas, y las salsas que se les agrega también, además del exceso de glucosa.
Y lo otro, es que se tiende acompañar si o sí este tipo de comidas con una bebida carbonatada azucarada.
8. Y por supuesto, no hacer ejercicio físico de manera constante.
Si solamente se cometiera este error, es posible que la persona se mantenga en un peso constante "ideal".
Pero si se cometen todos los errores mencionados, incluyendo este último, el aumento de peso en grasa corporal y los problemas de saluda arraigados, serán inevitables.
En los que tienen metabolismos prodigiosos, tal vez no haya un aumento exagerado de peso graso, pero si problemas de salud que tarde o temprano se manifestarán.
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