¿Por qué las personas sienten sueño luego de comer?
Sentir ganas de acostarse a dormir después de comer se da por ingerir alimentos en exceso de una sola, de un solo "tacazo".
Usualmente también suele cruzarse con un estado de agotamiento del sistema nervioso ya que se suele ingerir un almuerzo luego de una jornada laboral o académica matutina, y es normalmente luego del almuerzo que una persona suele sentir sueño.
Se combinan tanto el exceso de alimentos y por ende el desvío de mucha sangre para intentar digerirlos, junto con un posible agotamiento previo del sistema nervioso central (además del agotamiento de otros sistemas).
Casi todas las personas del mundo moderno siente sueño luego de comer
Sentir sueño o sentirnos algo somnolientos después de haber comido puede ser un indicio de que hemos ingerido una cantidad excesiva de alimentos que no va acorde con nuestras necesidades energéticas y nutritivas, que hemos exagerado en la ingesta de nutrientes macro y micro, muchas veces es un indicio de haber comida de gula.
En otras palabras, el hecho de comer una gran cantidad de alimentos de una sola quiere decir que muy posiblemente le estamos echando mucha más comida de la que nuestro sistema digestivo puede digerir de manera eficiente, que estamos "abusando" de algún modo de nuestros órganos digestivos.
Lo cual a corto o mediano plazo puede ser perjudicial para la salud cuando por ejemplo este consumo excesivo de alimentos es liderado por alimentos ricos en azúcares refinados y/o grasas saturadas o trans.
Con "eficiente" me refiero a que muchos de los nutrientes macro no se vayan a ser acumulados en exceso al tejido adiposo y visceral, y que tampoco se vayan a ser expulsados en grandes cantidades a través de las orina y/o las heces.
Sentir sueño después de haber ingerido una gran cantidad de alimentos de una sola es algo casi que inevitable si tenemos en cuenta la gran cantidad de sangre que nuestro organismo tendrá que enviar hacia los órganos de nuestro sistema digestivo para lograr o por lo menos intentar digerir esos alimentos procurando que no haya un gran desperdicio.
Por esta razón habrá poca sangre en otros órganos como el cerebro, y tejidos como el muscular esquelético, entre otros, que simplemente harán entrar a nuestro cuerpo en un estado de relajación y posible somnolencia.
Claro que esto no quiere decir que nuestro organismo no está trabajando, porque como ya lo mencioné el sistema digestivo si que lo está, y está casi que al 100% o de hecho a un porcentaje mayor, es decir trabajando en exceso.
Por supuesto que también es posible sentir sueño después de comer una porción moderada de alimentos si se tienen en cuenta otros factores que pudieron haber agotado posteriormente a nuestro cuerpo, más concretamente a nuestro sistema nervioso, como una jornada laboral o académica extenuante e intensa.
Caso tal por ejemplo de aquellos que estudian o laboran en la mañana y que después de almorzar, bien sea que coman grandes cantidades de alimentos o porciones moderadas (claro que afectará más a los que coman en exceso), sientan aun más sueño porque además de que la gran mayoría de la sangre estará en el proceso digestivo, el sistema nervioso estará algo agotado, por lo cual se sentirá una necesidad casi que incontrolable de hacer la siesta.
Más aun si se le suma el hecho de haber madrugado y posible mala calidad en el sueño nocturno.
Y bueno, la verdad es que realizar una pequeña siesta, y con pequeña me refiero a que no dure más de 30 minutos y tratando de no quedarse dormidos de manera profunda, no es algo malo y de hecho muy benéfico.
Una siesta corta y que no permita dormirnos como tal es algo así como un estado de meditación, en donde podremos oxigenar nuestra sangre y por ende nuestro cerebro y demás órganos, además de lograr descansar nuestro sistema nervioso para continuar con nuestras actividades cotidianas.
Lo malo es cuando una persona abusa y realmente se queda dormida de manera profunda por un período relativamente largo de tiempo (1 o más horas), levantándose aun más cansada, precisamente porque el cuerpo "piensa" que ya es hora de dormir como si fuera en la noche, y por ende siente que aun le faltan horas de sueño.
Sueño o somnolencia después de comer
Por supuesto que también está el tema de la costumbre, porque si bien alguien puede comer una porción moderada o relativamente pequeña de alimentos en su almuerzo u otra comida en el día, si está acostumbrada desde edades tempranas a dormir después de comer.
Pues su cerebro estará programado para hacerle sentir esa sensación, misma sensación que se puede controlar y evitar si así se lo quiere para volver a acostumbrar al organismo a no tener que entrar en un estado de somnolencia después de haberlo alimentado.
Porque realmente sería un desperdicio de tiempo sabiendo que en la noche vamos a tener suficiente tiempo para descansar.
Por supuesto que si se trata de una persona que apenas tiene tiempo de dormir, y no encuentra otro espacio más para hacerlo de una manera placentera que después de comer en su hora de almuerzo, por ejemplo, pues bien está en todo su derecho y podría decirse que es una forma de compensar lo que no se pudo lograr en el período de sueño nocturno bien sea por cantidad y/o calidad.
Dormir después de alimentarse o comer no es realmente algo malo si se tienen en cuenta las características de cada quien, y también el factor de la costumbre.
Pero hablando de personas que no tienen una jornada laboral nocturna y de personas que en sus noches cuentan con buenas horas y calidad de sueño, en este mundo moderno, si se quiere triunfar y así aprovechar el tiempo, lo mejor es dormir cuando se debe (en la noche) y no holgazanear durmiendo en las tardes.
Aunque dormir es bueno en términos de salud, un abuso de esto puede afectar notablemente nuestras capacidades cognitivas y desempeño físico.
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